jueves, 7 de mayo de 2015

De Alonso a Carlos Sainz, historia de una fotografía

El 13 de mayo de 2006 hice una de las fotos que recuerdo con más cariño, la de la charla informal entre Carlos Sainz padre, su hijo de entonces once años de edad, y Fernando Alonso. El piloto de Toro Rosso no deja de recordarla: "Hace años conocí aquí a Alonso y desde entonces he soñado con emularle y correr en Fórmula 1. Será un fin de semana muy especial para mí"

 Desde el momento que los vi juntos, supe que esa foto podría ser histórica. Habían pasado ya tres horas del final de la calificación cuando Fernando Alonso entró de vuelta en el motorhome de Renault.Trabajo con los ingenieros terminado. Aquella tarde venía de lograr la pole en casa. Era su primer momento de tranquilidad después de un día de emociones a flor de piel. El piloto asturiano pensaba, sin embargo, que la carrera iba a ser para Schumacher y su Ferrari porque el ritmo era mucho mejor. Se equivocó, al final fue él quien ganó de calle aquella carrera.
Carlos Sainz padre y su hijo le esperaban dentro del motorhome de Renault charlando con José Luis Alonso y Luis García-Abad. Hablaban de karting, del kart que debía elegir para ser competitivo. Carletes, entonces sí que se llamaba así, acababa de fichar por el equipo Genikart de Genís Marcó. El gerundense ya fue, durante los noventa, mentor en las locas carreras de pequeños monoplazas del propio Alonso. Tipos de ruedas, de chasis... eran charlas con olor a gasolina en las que yo era un afortunado espectador. Tenía el traje de amigo, pero conmigo la cámara de periodista.
La llegada de Alonso hizo que a Carlos Jr le cambiara la cara. Callado y muy observador, empezó a mirar absorto a Fernando mientras hablaba. El asturiano le tocaba la cabeza con cariño y le daba ánimos mientras él sólo sonreía. Y si Sainz padre le preguntaba al ovetense por cómo habían ido las cosas en la pista, su niño abría la boca y los ojos intentando aprender de todo lo que decía. No sólo era un ídolo, se trataba de un faro, su modelo a imitar en los circuitos. El ejemplo a seguir en la vida ya lo tenía en casa.
Les saqué tres fotos en mi vetusta Panasonic para no molestar. Y mandé dos a mi casa de entonces, el Diario AS. En una se le ve sonriendo a Carletes mientras Alonso aparece en escorzo. Esa es la que Sainz puso ayer en su  twitter. La otra, la que aparece en estas líneas, es la que se publicó en el periódico y quise que tuviera un papel protagonista en la separata central de fotos de mi libro, 'Viaje al Centro de la Fórmula 1'. Sainz recuerda con mucho cariño aquel encuentro y esa imagen: "Hace diez años vine aquí a ver mi primer gran premio. Descubrí este mundillo y desde ese día que soñar con ser piloto de F-1. Este va a ser un fin de semana muy especial para mí". A su lado, en una rueda de prensa FIA muy española, escoltado también por ese otro talento que es Merhi, Alonso se deshace en elogios con su amigo madrileño. Una amistad que siempre quiso cultivar, y ha hecho bien, el legendario Carlos padre. Para Fernando, estamos ante un posible heredero: "Estoy muy orgulloso de ver aquí a Carlos. Su talento es incuestionable. A todos les ha sorprendido, pero a mí no. Él es el futuro".
Desde la puerta del Ministerio del Tiempo que comunica con Barcelona 2006, se puede ver a un joven periodista subír acalorado las escaleras hacia la sala de prensa de Montmeló. Habla por teléfono: "Raúl, tengo una foto y una historia exclusiva. Es muy bonita. Puede ser la imagen que marque el futuro del automovilismo español. Lo malo es que son las seis y media y aún no he escrito nada..." Valió la pena. La gente supo de esa amistad que nacía en las carreras. Y los Carlos y Fernando tienen ahora esa imagen entre sus recuerdos.



sábado, 21 de junio de 2014

Felipinho Massa le dio a su padre el amuleto de la pole



A Frank Williams le brillaban los ojos. Los aplausos retumbaban en las paredes del motorhome, atestado de periodistas. Felipe Massa se movía suspendido en el aire. Una sensación que no vivía desde el GP de Brasil de 2008. Abrazó a su mujer, de nuevo a su niño y se fue a ver al veterano dueño de la escudería británica. Posó junto a él rodeado de una veintena de cámaras de televisión. Eran las cuatro de la tarde. En Spielberg, Austria, la otra historia de una pole inesperada...
La sorpresa que hizo que Rafaela corriera con el corazón latiendo a mil por hora a ver a su marido. Llevaba a Felipinho, su hijo, de la mano. Pasaron todos los controles y llegaron a tiempo para fundirse con papá. Se intuían las lágrimas dos semanas después de pasear por el infierno en Montreal. Esa carrera que voló por los aires a vuelta y media del final. El ex piloto rojo se comió a besos a su hijo, el 'artífice' de ese primer puesto en la parrilla. "Papá, coge este muñeco, te dará suerte"... Era una figura de Neymar, protagonista de partidos imaginarios en ese Mundial que juegan los niños. Ese de goles de colores y acrobacias imposibles. La colocó junto al casco reserva en su box. Lo besó. Después de su vuelta mágica, eufórico, se lo enseñó orgulloso a las cámaras de televisión. "Es la primera vez que mi hijo me ve ser el más rápido de todos. Es emocionante. Mañana puede pasar de todo, estoy en la mejor posición posible".

Mercedes flaqueó esta vez. Un equipo que tiene un margen abismal, pero cada vez es menos competitivo porque los pilotos gastan más tiempo en esconderse que en hacer correr el monoplaza. Sobre todo Rosberg, que se pasa todo el fin de semana desaparecido, hasta la calificación, para que no le copie Hamilton. Lewis tiene esa costumbre de aprovecharse de su compañero desde los karts y realizó su mejor temporada hasta ahora en la F-1, la primera, aprendiendo como una esponja de Alonso.
El piloto de Ferrari firmó su mejor calificación del año, cuarto, después de provocar en su muro los mismos aspavientos que la selección italiana de fútbol frente a Costa Rica, la víspera, en el motorhome de la escudería.Fernando se fue largo en la última curva y terminó dando saltos por la hierba. Stella se llevó las manos a la cabeza. Por un momento, temieron por el paso a la Q2. El 14 hizo otro intentó y aseguró su posición. Después, otro gran primer intento le permitió aspirar a un podio que él ve francamente difícil. Dependerá mucho de la primera vuelta. Con lo difícil que es pasar en el Red Bull Ring, cruzar por primera vez la meta entre los tres primeros puede ser clave para que se empape de champán el logo del Santander. La salida será frenética.
Ricciardo, quinto, es una amenaza con su Red Bull. Más enemigo aún es Hamilton subido a su Halcón Milenario desde la novena plaza. Lewis venía haciendo una pole planetaria... hasta que se pasó de vueltas. Se fue fuera de pista en la curva ocho, se quedó cuarto y le quitaron el tiempo por salirse a la escapatoria. Estaba avisado. Después, un fallo en el sistema de frenado eléctrico provocó su trompo en el intento definitivo. A Nico le hicieron levantar en su intento por precaución. Se tuvo que conformar con la tercera plaza. El asturiano, que está lejísimos en el Mundial debe entrar con todo al rubio líder del Mundial en los metros iniciales de la carrera.
Y Vettel, ay Vettel... Sin el soplado del escape ni su derivado, el efecto Coanda, no es el mismo. El Makinen de la F-1 se quedó fuera de la Q3, sale el trece y mañana deberá intentar una remontada de prestigio en la fiesta de su padre deportivo, Red Bull. Dos motorhome más allá, envuelto por paneles rojos, Alonso hablaba de lo bueno que es Massa: "Muchos no me creían, pero es el compañero más rápido que he tenido jamás. Me alegro por él". En el pesaje abrazó a su ex compañero. Mañana intentará batirle: "Espero terminar por delante de él en carrera". Hay carrera, hay emociones... Fórmula 1.

sábado, 10 de mayo de 2014

El control legal de tracción, otro de los secretos de Mercedes


En 2013 Red Bull eliminó de un plumazo sus problemas de desgaste de neumáticos al lograr que el motor dejara de acelerar intermitentemente en la salida de curva, con un efecto similar a los actualmente prohibidos controles de tracción. La FIA lo declaró legal y Mercedes ha logrado imitarlo esta temporada



Montmeló

En la F-1 la rueda es el mudo testigo que delata pilotajes erróneos, muestras de genialidad, coches buenos y malos, inventos al límite del reglamento... El nexo de unión de un monoplaza con el suelo es la clave del éxito. Cuanto mejor haga trabajar un coche su neumático más altas serán sus prestaciones... Y durante más vueltas podrá buscar sus límites el piloto en carrera. El año pasado Red Bull vio que sobrecalentaba el exceso el neumático a la salida de las curvas. En el arranque del año perdía demasiada tracción a la salida de las curvas. Y eso provocaba un desgaste excesivo de los compuestos. Necesitaban una solución. Y la encontraron a través de la gestión del cambio.

Antes ya habían trabajado en el soplado, los petardeos, en frenada, pero desde Montreal lograron simular con pequeños cortes de alimentación en plena aceleración el efecto de los antiguos controles de tracción. Y esa, junto al regreso a la estructura de kevlar en los Pirelli, fue la clave de su segunda mitad del año demoledora. Un plus que ningún equipo pudo alcanzar. Y que le permitió arrasar a la escudería austriaca y a un brillante Vettel. En Canadá unas huellas a la salida de L'Epingle fueron la primera señal de que algo diferente estaban haciendo. En Singapur la diferencia resultó ya escandalosa.


Mercedes preguntó, la FIA lo declaró legal, y desde septiembre han trabajado a fondo para empezar 2014 con esa ayuda en salida de curva. Han sido listos porque esa gestión inteligente de la tracción es aún más importante con el mayor par de los nuevos motores. La temperatura de trabajo del compuesto baja de golpe diez grados, no se sobrecalienta y el neumático aguanta muchas vueltas. En la primera jornada del GP de España el viernes los técnicos de Pirelli alucinaron con las 23 vueltas que hizo Lewis Hamilton con el neumático medio. Comenzó con 1:31.385 con el depósito lleno y terminó en 1:31.064. Hará dos paradas sin problemas.

Y con una curva plana de desgaste de neumático. Muy parecida al otro coche que también dispone de ese artilugio, el Red Bull. Ricciardo empezó sus 23 vueltas en 1:31.270 y las terminó en 1:31.988. No tan brillante, pero estable en 31.9 desde la cuarta vuelta. La diferencia entre la escudería de la estrella y los vigentes campeones (un segundo en calificación), sí que es de motor.

Ferrari no tiene ese control de tracción encubierto (pero legal) y por eso es muy probable que Alonso tenga que ir en la carrera de España a una parada más. Tampoco el resto de escuderías disfrutan de esa capacidad para volar a la salida de las curvas y cuidar además los neumáticos. Detrás de Mercedes y Red Bull hay un abismo de otro segundo por vuelta en ritmo de gran premio en Montmeló. Tremendo. Y en un circuito completo como el catalán los coches de plata han arrasado en todos los sectores. En el primero, de velocidad, el segundo, de curva rápida y el tercero, lento y de tracción.

Es un coche muy completo que disfruta de los beneficios de una inversión monstruosa desde 2009 para desarrollar estos nuevos propulsores híbridos. Tiene un centro de gravedad más bajo gracias a su radiador intercooler insertado en el chasis, un turbo mayor que permite recuperar más energía eléctrica, y una suspensión delantera mecánicamente impecable. El W05 es el hijo de la capacidad organizativa y habilidad ante la FIA de Ross Brawn, la solvencia de Aldo Costa en la parte mecánica y el atrevimiento de Paddy Lowe para buscar los límites. Frente a eso, Ferrari ha hecho un monoplaza sin potencia, con poca carga aerodinámica en la parte trasera y con escasa tracción. En este último aspecto resulta clave analizar el último sector de Barcelona, básicamente el estadio y la última chicane. Fernando perdía ayer ocho décimas durante la calificación sólo en ese tramo respecto a Rosberg. Raikkonen, seis. Algo que dejaría de suceder si la escudería italiana lograra imitar la gestión inteligente de la tracción de sus mayores adversarios.

lunes, 21 de abril de 2014

Los 900 CV del motor Mercedes y las dos versiones de Vettel

La escudería alemana espera alcanzar en las rectas de Monza los 370 km/h. Y para lograrlo hace falta una potencia 100 CV superior al tope más optimista de Renault y Ferrari

Eran las once de la mañana en Melbourne. La sala más grande de fiestas del casino hotel Crown lucía brillante, con esos colores de las películas de Steven Sodebergh. Ya saben, Ocean eleven, twelve... Unas horas antes del gran premio se celebraba el 'Grand Prix Breakfast', con algunos de los protagonistas del Mundial. Smoking para los señores y vestido de gala para las señoras. Habló Felipe Massa, repetía la palabra libertad, también Sutil, y las penurias de su dieta... Hasta que llegó el turno del nuevo rico de la F-1, Toto Wolff, el jefe de Mercedes. Movió sus largos y desgarbados brazos con expresividad para presumir de las nuevas carreras: "Este es una F-1 adecuada a los tiempos. Consumimos un 30% menos que en el pasado, pero con más potencia. Esperamos poder alcanzar en Monza los 370 km/h". No habló del sonido romo, ni del peso de las baterías... Pero, si esos datos son ciertos, su propulsor es capaz de alcanzar a una vuelta 900 CV. Eso es lo que corrían los monoplazas en ese escenario en carrera en 2005, 372 km/h para Montoya durante aquel GP de Italia. Y aquellos motores daban esa potencia en condiciones de carrera. Renault y Ferrari estaría a cien caballos de esa cifra en su mejor versión.
El constructor alemán ha dado en el blanco al separar compresor y turbo, algo que proporciona más progresividad y permite tener menores necesidades de refrigeración. Al ser más compacto, permite afinar más la aerodinámica. En el paddock se cree que, con el margen de seguridad que se ha dado la firma de la estrella, la ventaja actual es de unos ochenta caballos, un segundo por vuelta... A lo que hay que añadir las virtudes añadidas, si tienes más motor puedes poner más ala para correr más en las curvas, consumes menos al ir menos forzado... Se teme que Mercedes pueda hacer dobletes en casi todas las carreras. Y, de momento, su ritmo es el de Ferrari en 2004 con tres 'rodillos' en cuatro grandes premios.
China ha sido una carrera de reivindicación para Alonso. Aunque no una sorpresa. Resumió sus cualidades. Rápido en la calificación en agua, agresivo en la salida, cerebral y muy veloz en el vuelta a vuelta. Podio por delante de los más veloces Red Bull. También para Hamilton (por su portentosa pole en agua) o Ricciardo (de nuevo delante de Sebastian). Y ha dejado dudas sobre el tetracampeón Vettel y el aspirante a campeón Rosberg.
En realidad, la carrera de Shanghai habrá decepcionado a los que veían a 'Seb' como un piloto pluscuamperfecto. El que hemos visto arrasar sobre un tipo de monoplaza concreto, dominante. El de este 2014 se parece más al que perdió un Mundial en 2009. O al que no tenía la influencia de los escapes soplados en 2010. Su compañero Webber llegó mejor a la última carrera, la de Abu Dabhi. En el último tramo de aquella temporada hicieron debutar de manera discreta la primera evolución de esos difusores y empezó a volar. Le iba como anillo al dedo.
Sobre todo porque paliaba cierta tendencia al sobrepilotaje en frenada y aceleración. Lo dominaba con la ayuda de la sobredosis de carga aerodinámica de la obra maestra de Newey. De ahí viene el baile con ligeros toques de contravolante que con el que ha logrado algunas de sus mejores poles. Esa proverbial rapidez a una vuelta que tiene en su código genético evitaba los errores y se expresaba mejor con la particular conducción que exigían los soplados, primero, y el efecto Coanda, después. Hasta que Newey no copió y mejoró el diseño de escape de Sauber en 2012, el piloto alemán no volvió a planear por los circuitos. Lo mejor de aquel año, banderas amarillas al margen, fue verle arremangarse para remontar en Interlagos hasta alcanzar el título.
Por cosas como las que estamos viendo en este 2014, sigo pensando que Vettel es el tercer mejor piloto de la parrila, lejos eso sí del cuarto y con una capacidad de trabajo y de sintonía con sus ingenieros descomunal. Un poco al estilo de lo que fue Makinen en los rallys, que arrasó con un Mitsubishi muy superior, pero nunca tuvo la consideracíón de pilotos como Sainz o Kankkunen.
Y leo en las dos órdenes consecutivas que ha sufrido en favor de Ricciardo, que lo está haciendo de maravilla, una maniobra de Christian Horner para picarle en su amor propio e intentar que saque lo mejor de su pilotaje. El australiano pilota sin presión y viene de un Toro Rosso, con mucha menos adherencia. Sebastian, que está delante en el Mundial por dos ceros de su rival causados por fallos de Red Bull, tendrá que trabajar más aún de lo que suele para derrapar menos y ser más fino. Lo logrará, seguro, pero su curva de rendimiento irá a la par de la evolucíón de su monoplaza. Si el Red Bull vuelve a planear algún día, allí estará.

jueves, 10 de abril de 2014

Seis meses de Viaje al Centro de la Fórmula 1


Hola a todos de nuevo.
Reanudo el blog con un post de agradecimiento.
El abrazo sentido a todos los que os habéis adentrado conmigo en el paseo por mis memorias, mis recuerdos... Ese Viaje al Centro de la Fórmula 1. Pasan seis meses ya del nacimiento de este libro escrito con el corazón sobre algunos de los mejores momentos que he disfrutado en las carreras. Junto a Fernando Alonso, en sus celebraciones, los días de vino y rosas de Renault, la esperanza y la hiel de McLaren, el amanecer rojo, las lágrimas de Abu Dabhi...
Le agradezco enormemente a Fernando el prólogo. Pero no es un libro sobre su vida. Es un paseo por el centro del mayor espectáculo del mundo. Veréis a Michael Schumacher de cerca. Con sus virtudes y sus defectos. Ese carácter que le hace luchar ahora por la vida en el silencio de Grenoble, sólo roto por las palabras y la emoción contenida de su mujer, Corinna. También sabréis cómo y cuando Vettel se vistió de campeón.
En este "Viaje.." me acerco al chico de moda, Lewis Hamilton, y sus dos caras, la actual de rapero tatuado, frente a la de yerno ideal con la que aterrizó en las carreras. El torbellino Kubica, o el impetuoso Montoya, son otros de los protagonistas. Muy especial para mí es reencontrarme con Flavio Briatore y mucho es el cariño que tengo al capítulo de Pedro de la Rosa y su podio en Hungría, contado por él mismo. El Rey, Madonna di Campiglio, y las sensaciones de pilotar un F-1... Todo esto se encuentra en mi cuaderno de recuerdos.
Más allá de fríos números de ventas, el mayor orgullo es haber gustado a casi todos aquellos que habéis confiado en estas casi 200 páginas que han marcado un antes y un después en mi vida como periodista.
Han sido múltiples las felicitaciones en twitter. Podría poner muchos ejemplos de palabras hermosas, el último, de Óscar Rodríguez (@naufrago79): "Me lo he leído enterito en una sentada. Pedazo de libro. Gracias carlos, fenomenal, es como vivir la F1 desde dentro de un equipo. Gracias por acercarnos mas este deporte a los amantes de este deporte. Me ha encantado la tensión del libro y las curiosidades de los protagonistas. Me ha encantado de verdad,libro imprescindible para los que nos gusta la F-1".
Algunos me habéis pedido más técnica. Sin embargo, ese no era el objetivo, quería ir al lado más humano. Y otros me habéis dado la alegría de disfrutar con él pese a no estar muchas veces de acuerdo con mis opiniones. Siento que haya gente que no se acercara por prejuicio. Aún estáis a tiempo, lo ténéis a la venta por 16 euros en papel y seis en digital. Edita Corner.

También le ha gustado a pilotos y a periodistas. Pedro de la Rosa ha disfrutado mucho con su capítulo: "Me lo he leído varias veces". Y Marc Gené, gran aficionado a la lectura, me dio en Malaisia su veredicto: "Carlos, me lo he terminado y me ha gustado mucho, se lee muy bien. De todos los capítulos los que más me gustan son los dos de Fernando en McLaren. Yo los vivi en la distancia y desconocía muchas cosas. También describes muy bien como era la F-1 en la que debutamos Pedro y yo".
Con las lagunas que pueda provocar la memoria, tengo que agradecerle a Paco González su cariñosa presentación, a Andy Soucek que le ayudara, y a Carlos Sainz JR que acudiera al acto en la FNAC. A mis hermanos de COPE, por supuesto, de Buroaga a Larrañaga, hasta en cinco programas distintos se habló del "Viaje..."
También a AS (con mis amigos Manuel Franco y Raúl Romojaro al frente), Marca (gracias Marco Canseco), Mundo Deportivo (gracias Raimon Blancafort), La Vanguardia, a la agencia EFE (gracias a Adrian Huber y al comunicado que me hicieron), a Antonio Lobato por su mención en la tertulia de Nitro, Nira Juanco y Jacobo Vega por destacarlo también en twitter. Que no se me olvide el ingeniero Manuel Muñoz. Ademas de hacer proselitismo, le ha regalado el libro a sus amigos.
Gracias a Manolo Lama, que presumió de libro al final de 'Los Manolos' de Cuatro. También a Periodista digital y PR noticias por entrevistarme. Gracias a Porti y la charla que dí sobre el libro en Madrid Motor Days junto a Santi Ayala. Al departamento de prensa de Corner. En fin, a todos los que echásteis una mano a este proyecto, gracias. Algún día emprenderemos juntos otro viaje...





martes, 18 de febrero de 2014

Bahrain medirá los neumáticos y la fiabilidad de Red Bull

Hola a todos. Si Red Bull sigue con problemas de motor en los dos próximos test de Bahrain, pondrá en serio peligro sus posibilidades de éxito en las primeras carreras del Mundial. Hasta Barcelona. Por eso deberíamos ver ya desde mañana algunas modificaciones en el RB10 para enfrentarse al desafío del polvo y del calor. Por lo visto hasta ahora, hay dos tipos de problemas, el del sobrecalentamiento de las baterías y del funcionamiento del ERS. Renault cree haber solucionado el primero, pero hasta ahora el propulsor sólo ha funcionado con la disposición de Lotus, más conservadora que la adoptada por Toro Rosso y Red Bull. El equipo italiano no pudo completar los cien kilómetros de su segundo filming day del año en el circuito de Misano. Con los días pasados desde Jerez al menos hemos podido ver cómo Newey reconocía su culpa al haber hecho un pack "demasiado agresivo", y que no permitía refrigerar bien el motor. Pero también le metía un palo a Renault por sus grandes necesidades de refrigeración. Una crítica absolutamente injusta porque el equipo francés ha trabajado todo este tiempo bajo sus directrices. Igual que lo hizo en el pasado cuando logró tener el motor que mejor soplaba de la parrilla, clave para los escapes soplados. Han sido semanas muy duras para el equipo de ingenieros que dirige Remy Taffin, con insinuaciones veladas, y altamente improbables, de que Red Bull tenga otro suministrador de propulsores para 2015. Y digo altamente porque ni Mercedes ni Ferrari tienen ganas de darles ni agua. Honda sería una alternativa, pero tienen exclusividad con McLaren en su regreso a las carreras. Si Vettel y Ricciardo hacen suficientes kilómetros entonces tendrán cuatro días más a finales de febrero para pensar en el desgaste de neumáticos, los reglajes y las prestaciones. El match ball se habrá salvado. Si no ruedan entonces todo se les complica mucho para Australia. Los neumáticos Bahrain será la auténtica prueba de la verdad para los neumáticos de 2014. Son más duros que los del año pasado, y cuesta calentarlos, algo que puede ser un claro problema para Ferrari. Pero será la primera vez que sean sometidos a las tremendas acelaraciones de un circuito de tracción con el mayor par de los nuevos motores turbo. También serán sometidos al calor. Los compuestos que utilizarán estos días son el blando, el medio (también con otra versión experimental), y el duro en dos versiones, la de Bahrain y la que llevaron en Jerez. El 'coco' Mercedes En el paddock, y entre algunas escuderías, ven imposible alcanzar la potencia de los motores Mercedes. Pero hay otros elementos este año importantes, y uno de ellos es el consumo. Aspecto en el que en Ferrari están muy satisfechos. Se cree que desconectan sus cilindros cuando levantan el pie del acelerador. También han acertado, de momento, en la capacidad de refrigeración. Hamilton y Rosberg fueron los que más impresionaron en Jerez, también McLaren... Pero el equipo de Button fue con una evolución aerodinámica más importante al trazado andaluz. Necesitan patrocinadores. Gustará más o menos, pero Ron Dennis les ha puesto firmes. Esperan la llegada de Bouiller. Fenómeno Magnussen Reconozco que al principio pensé que era un caso clásico de fenómeno coreado por la prensa inglesa, pero mis fuentes en el paddock me hablaron en Jerez de que Kevin Magnussen es un gran talento, muy rápido y que ha encantado a sus ingenieros.

miércoles, 4 de diciembre de 2013

Vettel y el beso de Bernie Ecclestone

Hola a todos. Mil disculpas por los meses sin publicar en el blog. He seguido publicando en La Gaceta y he tenido el placer de escribir mi primer libro, "Viaje al centro de la Fórmula 1". Ecclestone le ha tirado esta semana una andanada a Fernando Alonso. Dice en el prólogo del anuario oficial de la Fórmula 1 que el asturiano se desmotivó un poco porque buscaba otra escudería. Y de Vettel dice que es el mejor piloto que ha conocido. Para contextualizar estas palabras, os dejo aquí mi hasta ahora último artículo de La Gaceta. Es la escena a la que asistí en la sala de prensa de Brasil minutos después de la carrera.... Fue una escena cuando menos curiosa. Webber respondía a una pregunta.... En ese momento la puerta de la desvencijada sala de prensa de Interlagos se abrió y apareció un honorable señor mayor con una bandera de Brasil. Era Bernie Ecclestone. Vettel le saludó con la mirada y el patrón de la F-1 le lanzó un cariñoso beso a su nieto de las carreras. El mismo al que coronó el día anterior como “mejor piloto de la historia” ante los micrófonos de la Sky italiana. Alonso, sentado al lado de 'Seb' se dio cuenta del compadreo entre el tetracampeón y el todopoderoso británico. Esta amistad es una derivada de la estrecha relación entre Horner, el el jefe del equipo, y Bernie. Y sus dos equipos azules, la carrera en Austria 2014... Que el alemán es un gran piloto es indudable, pero también es indiscutible que le arropa el equipo más poderoso de la última década... Si tu brazo político funciona en los despachos es más difícil tumbar las ocurrencias al límite de la norma de tus ingenieros. Y eso es un mérito del equipo azul, no hay duda. En la funcional sala del circuito Paulista la rueda de prensa se interrumpió antes de tiempo porque Ecclestone quiso acercarle una bandera de Brasil en la que todos los pilotos habían firmado menos Vettel. Con voz susurrante le dijo: “Sólo faltas tú”. Y concluyó entre bromas: “Te pediría que le dieras un beso...”. Un gesto bueno para la imagen de Seb, que le escribió una dedicatoria mientras Fernando miraba alucinado a su amigo Mark. Se cerraba así la polémica de las órdenes de equipo de Malaisia. Con un beso y una bandera.